Table Of Contentmemorias
Luis E. Valcárcel
MEMORIAS
Editadas por:
José Matos Mar
José Deustua C.
José Luis Rénique
INSTITUTO DE ESTUDIOS PERUANOS
© IEP ediciones
Horacio Urteaga 694, Lima 11
Telfs. 323070 - 244856
Impreso en el Perú
1ª edición, julio 1981
CONTENIDO
Presentación 9
I. El Cusco de comienzos de siglo 11
II. Tempestad en los Andes e indigenismo 109
Primeros recuerdos 111
Niñez y adolescencia 121
Antecedentes del indigenismo, reforma universitaria
y 'escuela cusqueña' 130
En la Universidad San Antonio Abad 150
Actuación política y primer viaje a Lima 159
Entre la educación y la política 173
Ultimos años universitarios 182
Concejal, catedrático y diputado frustrado 196
Matrimonio y vida familiar 205
Actividad intelectual a comienzos de la década de 1920 211
En la oposición al "oncenio" 222
Mariátegui, Haya y el indigenismo 234
III. Hacia el conocimiento científico del mundo andino 257
La crisis de 1930, la Universidad de San Marcos y
el Museo Nacional 259
La arqueología peruana y la Revista del Museo Nacional 277
Redescubrimiento del Cusco e impulso a los
estudios peruanistas 289
Inicios de la etnología en el Perú y la nueva
perspectiva indigenista 313
La guerra y las actividades antifascistas 327
Ministro de Educación 337
El Museo de la Cultura Peruana y el
Instituto de Etnología de San Marcos 358
El terremoto del Cusca de 1950 378
Los últimos años en San Marcos 384
Viajes y congresos a partir de 1947 400
Los años del retiro 412
Bibliografía de Luis E. Valcárcel 423
Indices 457
Indice onomástico 459
Indice geográfico 473
PRESENTACION
En su larga y fecunda vida, Luis E. Valcárcel ha contribuido de ma-
nera esencial al esclarecimiento de la historia del Perú antiguo y a re-
velar, a través de la investigación, la multiplicidad cultural del Perú.
Su obra revaloró el pasado incaico, hizo ver la continuidad que liga al
campesino del Ande con el hombre del Tahuantinsuyu y, como ningún
otro intelectual de su época, captó la ideología implícita en las moviliza-
ciones campesinas de los años 20, previendo las repercusiones que sobre
la vida peruana tendría el inicio de esas luchas. Pocos como él han apor-
tado tanto al conocimiento de nosotros mismos como colectividad y na-
ción.
De ahí la importancia de estas memorias. A partir del relato de
su acontecer personal nos conducen por diversos momentos de nues-
tra historia intelectual, tanto los florecientes y productivos cuanto esos
otros, torvos, en los cuales la censura y la intolerancia silenciaron el de-
bate de ideas y el libre ejercicio de la crítica. Más que autobiografía,
éste es un testimonio personal que nos remite a una historia colectiva.
A través de ella ―de célebres debates, de estilos de vida hoy desapa-
recidos, de arduas contiendas políticas― Valcárcel, con espíritu de ba-
lance y con el legítimo deseo de registrar para las generaciones futu-
ras lo que sus predecesores hicieron o dejaron de hacer, nos ofrece su
impagable visión de una época de la que es actor y testigo de excepción.
No somos los llamados a establecer si en la elaboración del pre-
sente volumen hemos conseguido aprehender las peculiaridades y
matices de la personalidad del gran historiador. Pero sí podemos
dar fe de la verdadera pasión con que asumió la tarea, labor que
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ha demandado largo tiempo desde que se planteó por primera vez,
hace diez años, la posibilidad de emprender la. Ya entonces volcar
en un manuscrito ochenta años de intensa actividad excedía las ener-
gías de Valcárcel. Se eligió por ello la grabación magnetofónica. Es
la palabra viva, pues, y no la pluma del autor la que recupera aquí,
entre tantas cosas, sus años juveniles en el Cusco, su histórica amis-
tad con Mariátegui, la agitación política de los años 30 y su tenaz por-
fía contra la incomprensión, la estrechez económica y el conformismo
que, persistentemente, han obstaculizado la labor cultural e intelectual
en el país.
Balances parciales del material acumulado, realizados periódica-
mente, suscitaban comentarios y nuevas preguntas. De esta manera
fueron reduciéndose los vacíos y aflorando cada vez más recuerdos.
Sólo donde la asombrosa memoria del autor no podía llegar, entró en
juego esa otra memoria, la escrita, que Valcárcel ha conservado en su
valioso archivo personal, repositorio de testimonios inéditos de desta-
cados personajes de la intelectualidad peruana y extranjera, y de mul-
titud de documentos y apuntes que redactó, en diversos momentos de
su vida, sobre sus actividades y sus ideas. De la confluencia de estas
diversas prácticas que permitieron elaborar varias versiones previas,
sucesivamente corregidas y aumentadas, fue surgiendo el presente tex-
to, testimonio veraz que ha requerido una minuciosa labor de organiza-
ción y ordenamiento. Finalizada esta tarea, quienes acompañamos a
Valcárcel en la empresa de rescatar más de ocho décadas de recuer-
dos podemos decir que la nuestra ha sido una experiencia extraordi-
naria.
Luis E. Valcárcel estuvo estrechamente vinculado a nuestro naci-
miento institucional. Y lo está a nuestras preocupaciones, pues él tra-
zó para el estudio de la sociedad nacional lineamientos que aún perma-
necen vigentes. La publicación de este libro tiene así, para el INSTITUTO
DE ESTUDIOS PERUANOS, un doble sentido: el de reconocimiento al amigo
generoso y el de homenaje al lúcido maestro.
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