Table Of ContentColección Arqueología
Espacios sagrados,
SERIE LOGOS
ESPACIOS PROFANOS
C uevas mayas
DEL CENTRO'ORIENTE DE YUCATÁN
Luis Alberto Martos López
INSTITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGÍA E HISTORIA
Martos López, Luis Alberto.
Espacios sagrados, espacios profanos. Cuevas mayas del centro-oriente de Yucatán / Luis
Alberto Martos López. - México : Instituto Nacional de Antropología e Historia,
2014. Indice
332 p.: fotos, mapas, il.; 23 x 16.5 cm. - (Colección Arqueología. Serie Logos)
ISBN: 978-607-484-481-8
1. Cuevas (En religión, folklore, etc.) - Análisis e interpretación - Yucatán. 2. Arqueo
logía simbólica - Yucatán. 1.1. II. Serie.
LC: GB618.16 / Y8 / M37 Introducción 11
Cuevas, símbolos y rituales 21
El área de estudio 3'
Cuevas del centro-oriente de Yucatán 47
Cuevas complejas: Aktunkoot y Chanchen 141
El complejo simbólico de las cuevas mayas 211
Primera edición: 2015
La cueva en otras regiones mayas 285
D.R. © Instituto Nacional de Antropología e Historia
Córdoba 45, col. Roma, C.P. 06700, México, D.E
Conclusiones 301
[email protected]
Bibliografía 315
ISBN: 978-607-484-481-8
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Impreso y hecho en México
Y fue en el Paraíso Terrenal donde
fuimos formados y creados por Dios
el gran Señor. No estimaron su nombre
debido a sus pecados. Y lo llamaron
Seiván Tuldn y Simeyetón, dice la historia.
Y este es Wukub Pee, Wukub Siwán.
Que verdaderamente fue en la cueva,
la barranca donde durmieron en el oriente.
Moraban allí antes de venir.
Título de Totonicapan
In t r o d u c c ió n
Para los antiguos mayas de Yucatán, las cuevas tuvieron especiales
S n rficad T f relevancia, pues además de su importancia como fuen-
r Í obtención de agua, bancos de matenal pata la construcción
áreas de trabajo para ciertas actividades domésticas o artesanales y
aun como habitaciones, estas formaciones naturales ^ r™ co n ce
das como espacios sagrados, relacionados directamente con los con
ceptos de inframundo, dualidad día-noche, luz-oscuridad, fno-ca ,
esterilidad-fertilidad y vida-muerte.
En el antiguo pensamiento maya las cavernas preservaban
za S energía primigenia y la fertilidad, y en ellas se acumu
laban los grandes depósitos del agua de lluvia, guardados celosamente
s» y - »
otro- en otras palabras, a través de las cavernas era posible discur
del nivel celeste al terrestre y al mundo inferior, y se establecía
tacto con las deidades que reinaban en cada uno de los planos.
Sin duda, la idea más importante del pensamiento maya eri cuanto
a las cuevas fue la creencia de que éstas funcionaban como portales,
como puntos de contacto y comunicación con el >nmate •
En el caso específico de Yucatán, la geomorfolologia karstica que
favorece Información de cavernas y cenotes posibilitó que los ma-
vasTesLollaran una concepción sobre tales formaciones naturales,
además de la aproximación y la interacción con ellas como mun
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práctico y material: un ámbito interior con características y cualida
des propias considerado sagrado. En efecto, los mayas conocieron ese
mundo subterráneo, se adentraron en él y lo aprovecharon; conocie
ron el complicado sistema laberíntico de galerías, túneles y cámaras:
espacios oscuros y misteriosos contenidos por paredes ornamentadas
con profusión de manera natural que, en muchos casos, contaban con
importantes mantos de agua.
Con semejantes características, no fue difícil para el antiguo pen
samiento maya considerar que las cavernas debieron ser forjadas por
fuerzas sobrenaturales en una época mítica, y en consecuencia, fue
ron constituidas como una parte importante del paisaje sagrado de
Yucatán.
En ninguna otra región de Mesoamérica las cavernas son tan abun
dantes, por lo que fueron integradas a la vida profana y simbólica de
una cultura. Y así como los cerros, los volcanes, algunos lagos y otros
Figura 1. Muro con acceso en una
elementos geográficos destacados fueron referentes y formaron parte
caverna de I Iomún, Yucatán.
del paisaje ritual de los pueblos del centro de México, así las cuevas
lo fueron para los mayas de la península de Yucatán.
De igual forma, en ninguna otra región se agregaron y adaptaron
tantos elementos arquitectónicos, escultóricos y pictóricos a la confi
guración natural de estos espacios, como sucedió en las cuevas de Yu
catán. Los mayas se encargaron de levantar muros, escalinatas, altares
y templos, así como de labrar relieves o plasmar pinturas para adecuar
estos espacios sagrados a las necesidades rituales (figuras 1-4).
Como en otras áreas mesoamericanas, en Yucatán la caverna se
convirtió en el espacio sagrado para la práctica de ceremonias y ritua
les. En el pensamiento antiguo todo está sujeto al cambio continuo,
a un proceso natural de nacimiento, vida, desarrollo y muerte, sólo
para llegar a un nuevo renacimiento. De esta manera, todo lo que
existe y todo cuanto sucede a lo largo del año queda aniquilado en
determinado momento, para resurgir de nuevo al año siguiente. Por
medio de los rituales, el hombre participa de esa aniquilación, y por
lo tanto, también experimenta el renacimiento.
Las cavernas de Yucatán pudieron ser escenario y espacio sagrado
Figura 2. Impresión de manos plasmadas en la bóveda de la cueva de Las Manitas,
para el desarrollo de ritos de nacimiento, bautismo, embarazo, curación,
Homún, Yucatán.
iniciación de grupos esotéricos o sociedades de hombres, investidura de
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poder político y control social, así como p.u.i « I d< ..mullo de ceremo
nias religiosas de fertilidad, petición de lluvias, cacería, abundancia y
otras tantas vinculadas con los ciclos nal tírales de vida y muerte.
En el presente trabajo pretendemos estudiai algunas cavernas lo
calizadas en la región centro-oriente de la península de Yucatán. El
objetivo principal es analizar vestigios arqueológicos existentes en
ellas y formular algunas interpretaciones sobre la variabilidad y el
tipo de actividades rituales desarrolladas en tales espacios, desde la
perspectiva de la arqueología simbólica.
El área de estudio comprende una parte del territorio que a la lle
gada de los europeos formaba parte de las provincias regionales de
Cochuah y Ecab. Por tanto, el estudio comparativo entre las cuevas
de la costa y de la zona central de la península permitirá determinar
si existen diferencias sustanciales en el tipo de elementos arqueoló
gicos presentes y, por ende, en el tipo de ritual desarrollado en ellas.
La hipótesis es que en esencia los elementos presentes en las caver
nas de ambas regiones serán los mismos, pues se cree que tanto el
concepto de la cueva como espacio sagrado y el ritual involucrado
es prácticamente el mismo, con diferencias de tipo cuantitativo más
que cualitativo, que quizá respondan a una búsqueda de identidad y
diferenciación regional de linaje y poder.
Dentro del esquema ideológico maya, la cueva fue concebida y
conceptualizada con base en un complejo sistema de significación y de
representación. Se convirtió en un espacio eminentemente sagrado
para hacer diversos tipos de rituales. Por ello, tanto en su conjunto
como de manera particular, cada elemento que la integra, ya sea natu
ral o cultural, interactuó como eslabón de una concatenación de sig
nificados y significantes, que adquirió una inteligibilidad estructural;
es decir, al enlazarse entre ellos, crearon sentidos nuevos que pueden
interpretarse en el contexto de esa lógica de conjunto.
Proponemos el desarrollo de esta investigación desde el marco
conceptual de la arqueología simbólica de Turner (1999), retomando
ciertos aspectos de la fenomenología de Eliade (1983) y de Van Gen-
nep (1986). El enfoque estructuralista de Lévi-Strauss (1996) basado
en la oposición de conjuntos binarios podría resultar de gran valor,
pues en este trabajo consideramos que el ritual dentro de la caverna
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formó parte de un sistema estructurado, con unidades, correlaciones y además que el alcance y la complejidad di tale1. phu e\i»*. serán más o
reglas específicas; se trata de un sistema expresivo de poder sugestivo
menos proporcionales al tamaño y complejidad de ese grupo.
y significativo.
Como ya mencionamos, el área de estudio abarca una amplia re
Por constituirse como un sistema de expresión, algunos elementos
gión que comprende desde la porción sur central del actual estado de
del análisis estructuralista desarrollados por Ferdinand de Saussure Yucatán, hasta la parte central de la costa oriental de Quintana Roo;
para el hecho lingüístico y algunos aspectos retomados de la semánti-
desde las actuales poblaciones de Ghikindzonot, Ichmul y Tihosuco,
ca también constituyen herramientas de interpretación importantes, basta Tulum y Playa del Carmen, en la costa del Caribe; zona que en
por ello retomaremos principalmente el modelo de la significación
la actualidad es llamada la Riviera Maya.
manifestada de Greimas.
El trabajo comprende un total de veinte cavernas de caracterís-
La variedad de elementos de este sistema obliga a la descripción y
licas diferentes y con diversos elementos arqueológicos, por lo que
análisis independiente de cada uno, para después retomar niveles de
consideramos que la muestra es representativa (figura 5).
interrelación, pues las partes adquieren relevancia por su integración Son pocos los trabajos de reconocimiento arqueológico hechos en
al todo.
la zona central de Quintana Roo, y son aún más escasos los trabajos
Aunque más adelante ahondaremos en estos conceptos, en la in
tic excavación. A diferencia de otras zonas visitadas por exploradores
vestigación entenderemos el ritual como “...una conducta formal
y viajeros del siglo XIX, el área de estudio se mantuvo aislada hasta las
prescrita en ocasiones no dominadas por la rutina tecnológica, y rela
primeras décadas del siglo XX debido a que buena parte de este terri
cionada con la creencia en seres o fuerzas místicas” (Van Gennep,
torio fue zona de conflicto, ocupada por mayas rebeldes.
1986: 21), mientras que el símbolo sería “...la más pequeña unidad
En contraste, la costa oriental ha recibido mayor atención para
del ritual que todavía conserva las propiedades específicas de la con
proyectos de investigación. Aunque durante las primeras décadas del
ducta ritual; es la unidad última de estructura específica en un con
siglo XX se mantuvo como una zona inexplorada, en las últimas déca-
texto ritual” (Van Gennep, 1986: 21).
das se hicieron investigaciones importantes.
En este trabajo consideramos que la caverna funcionó como un
¿Qué tipo de ceremonias tenían lugar en las cavernas de Yucatán y
“símbolo dominante” dentro de la estructura ritual maya. Es decir,
cómo se desarrollaban? ¿Quiénes participaban en ellas? ¿En qué épo
que no sólo fue un medio para el desarrollo y el cumplimiento ade
cas y con qué periodicidad se efectuaban? ¿Existen diferencias cuali-
cuado de un ritual determinado, sino que refiere y representa un valor
iat ivas en el tipo de elementos arqueológicos presentes en las distin-
considerado como fin en sí mismo, es decir, se refiere a un valor axio
i as cuevas? Estas son sólo algunas de las preguntas que se pretenden
mático (Van Gennep, 1986: 27).
abordar en este trabajo. El problema no es fácil de resolver pues los
De igual forma, en las cavernas del área estudiada hay diversos
ai lores han desaparecido; sin embargo, contamos con evidencias ma
elementos arqueológicos, como muros, pasillos, escalinatas, altares,
ní lales de esas actividades, elementos que se convierten en símbolos
relieves, ofrendas, etc., que debieron funcionar como “símbolos ins
y que refieren los antiguos rituales.
trumentales”; es decir, que eran utilizados como medios para alcanzar
I ambién hay información relevante en diversas fuentes históricas
el fin principal del ritual (Turner, 1999: 35).
y < locumentos de primera mano de la Conquista, y de épocas posterio-
El desarrollo de rituales dentro de las cavernas forma parte de am
i es, que mencionan el uso de las cavernas por los mayas y sus carac
plios e importantes procesos sociales, por lo que la identificación,
ha ísticas, lo que representa una base importante para la recuperación
estudio y análisis de los distintos símbolos interactuantes permiti
«!«• datos. Además, hay estudios de etnografía hechos en comunidades
rán una aproximación al grupo social que los generó, considerando
mayas actuales que pueden proporcionar información adicional.
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De esta manera, a través de dalos aiqurt >l< »i;i* < >•,, t«miplemenlados
con información documental y ctnognilu a, e interpretados desde la
perspectiva de la arqueología simbólii a, se prelende obtener algunas
respuestas.
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Cuevas, símbolos y rituales
El ser humano comprende e interpreta tanto el ambiente que lo rodea
y con el que interactúa, como la sociedad en la que está inmerso, por
medio de un sistema cultural compartido de significados que se enfoca
en los símbolos.
La presente investigación parte de la premisa de que en ciertos
contextos, las cuevas fueron concebidas como un símbolo para los ma
yas, y también lo fueron los diversos elementos arqueológicos presen
tes en ellas, como relieves, altares, templos y pinturas, entre otros.
Por lo anterior, consideramos que hacer un análisis desde la pers
pectiva de la arqueología simbólica puede aproximarnos a la recons
trucción y el entendimiento de los sistemas simbólicos relacionados
precisamente con las cuevas, ya que significaron una forma de inter
acción humana tanto en aspectos de índole social, como en los rela
cionados con el universo sobrenatural.
Las cuevas fueron comprendidas y valoradas por los mayas en re
lación con la organización del cosmos, y por tanto, con el sistema
de reglas diseñado para la interacción óptima de la sociedad con el
mundo sobrenatural, con lo cual se garantizaba prevalencia del orden
en ambos niveles y en ambos sentidos.
El desarrollo conceptual de las cuevas mayas formó parte de un
complejo sistema simbólico de significación y de representación, en
el que el todo se relacionaba con las partes, como una complicada
cadena de significantes y significados que sólo cobraban sentido al ser
interpretados dentro de la lógica del conjunto total.
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