Table Of ContentContenido
Próloto ••
lnaroduc:c•ón llll
Primera parte Evolución unilineal 1
Herbert Spencer
Anlccedemes 3
lnlrcxluoción 5
l. La evolución de la sociedad 6
Lewis Henry Morgan
An1ccedc111es 29
ln!tcxlua:ión 31
2. Sociedad antigua 32
ANTltOPOI.OCIA. l,«t"'JK. Sq,. ... t6ri6A
Edward Burnett Tylor
No t»~A pennittda b rcprodlk'CIOn u;nal ~ patci31 ck t:~>te libto. nj su ll'll••nlento
infonnátiro. 111 la lrllnunlllón ck mn¡una fonna o POf cualquier mC'hn, )'1 Soell
dooltón.ioo, •nocAnku. pvr fotoc:opi.a. por rt!iJHo u otro' mftodoa. lin el pcrmlw
pre,io y por c!iCnto de IO(lllhtlarcs dd Copynght. Antccedenle< 61
DEJtECHOS RESERVADOS C 1991 mpecto ala prirntra edición t-n C!lpaAol. por lnlrcxluoclón 63
McGRAW·HILIJlNT[IlAMtRICANA DE ESPAÑA. S. A
3. Cultura primitiva 64
&tifo<IO \'alr<U). 1.' rlonta
s.....i.l7
2102) Ani,,...IM"*"ll
TrWoado dt la ..,_. C!dJao• a. •qiO ck Segunda parte Antropología cultural
ti1CH POl..''TS L"'-í A' '1"ftROr'Ot.OCY
temprana 79
Cop,.ri¡Jw O MCMUOOC\ 111 por McGt•••H .. In<.
ISBN o.G7·Sl.I9T7·2
ISBN: 114-411.0010.7 Franz Boas
o.p¡,.iiOI<aol· M )04·1""7
Compursto en: MMO(:omp. S. A.
lmrn:ao t-n, l.avd, lnd'"'ri" Oriro. s A. An1ccedcn1es 81
ln!rcxlucción 83 '
IMPRESO EN ESPAAA • PliUNTED IN SPAIN
Prólogo
28. Pasajes, márgenes y pobreza: simbolos religiosos
de communistas 517
ereaooo
Clifford Geertz / que el nacimiento de este libro es poco común. Alrededor de 1967.
c:uudo Gluc:r.,.. un estudiante en la Universidad de Northv.cstem. emprendiÓ
cuno de Jec:tura con Bobannan sobre los impotUntC> cscntos hist6tieos en
1111
Antca:dentc:s 54S a~~uopologla. Unos a~os más tarde, daba un curso sobre la historia de la
Introducción S46 uuopoloíta en Purdue, al mismo tiempo que Bohanl\8n se hacia cargo de este
cuno en Norlhwcstcm. Comparábamos notas siempre que nos encontrábamos y
29. Descripción densa: bacía ~ teoría interpretativa
vimOS que ambos tcnlamos el mismo probJcma: maestras clases crnn tnn grandes
de la. cultura 547 que no habla surocientcs copias de los materiales históricos ncccs;~rios en las
bibliotecas de nuestros universidades. En muchos casos. no ern posible comprar
Postludio 1973 S69 copiu .adicionales. Por tanto. no todo el mundo podía leer lo nsi¡nado.
PosUudio 1988 569 Decidimos hacer al¡o al respecto y la solución roe este tipo de Jec:turas; es
Sobre lo. autora S70 obviamente un compromiro. porque elc:studiante prolesional ncecsita menos una
biblioteca. Sin embar¡o, ambos dc:scubrimos que el U50 de estas lecturas incre·
_.tar\1 enormemente la efoetividrul de nuc:sllos cursos.
A mcdiadot de los años ocmnta, el libro todavía estaba en uso. Sobre la base
de un cuidadoso estudio de mercado realizado por Random Hou..,.Knop(, com·
probamos que lu lcctu,.. continuaban siendo de votal onterá - s61o a una le
lioluban firmes ddcnJOres entre los profesores que usaron el hbro--. Esta rue
suprimida. Nuevas selcceioncs sc añadieron para actualaar el tema. No obstante.
eeaÚII se acerca uno a ~u propio tiempo. las tincas generales del proceso de la
diociptina se hacen borrosas. Aunque eonroamos en que las Jec:turas que hemos
iocluido 100 apropiadas, no estamos tan seguros de que otnos hayon sodo eorrec
tamcotc excluidas.
Muchas introducciones a las lecturas ncccsiUlban un nuevo plantcamtento
debido a los quince años que median desde que se escribieron por primera vez.
Por ello. rueron refundidas. Muchos autores hablan muerto desde entonces. lo
cual hacia necesario volver a trabajar en sus bio¡rana,. Como en la primera
edic:i6ft. Bohannan escribió el primer borrador de la introducción y los antece·
dentes para cada lectura y Olazer redactó el primer borrudor de la introdua:ión.
Ambos 10mot responsables del borrador finaL
wl
--
Bronislaw Malinowski c.-/ Marshall D. Sahlins
Antecodentes 281 Antecedct>tts 369
Introducción 283 lntroducdón 370
'
17. El grupo y el individuo en el análisis funcional 284 23. Evolución: específica y general 370
A. R. Radcliffe-Brown Marvin Harris -"
An tece<lcntcs JOS Antecedentes 391
Introducción 307 1n troducc:ión 392
18. Sobre el concepto de función en la ciencia 24. Principios teóricos del materialismo cultural 393
r
social 308
Quinta parte Símbolos y
19. Sobre la estructura social 315
estructuras 419
Cuarta parte Ecología cultural
E. E. Evans-Pritchard
y teoría neoevolutiva 329
Antecedentes 421
Julian Steward
Introducción 423
25. Antropología social: pasado y presente 424
Antecedentes 331
lntroduocl6n 333
v
Claude Lévi-Strauss
20. El concepto y el método de la ecología cultural 334 /
Leslie A. White Antecedentes 437
Introducción 439
26. Estructura social 440
Anteecdcntcs 345
lntroduceoon J47 27. La historia de Asdiwal 474
21. El símbolo: el origen y la base del comportamiento
humano 347 Victor Turner
lntroducc:ión 348
Antecedentes SIS
22. La energía y la evolución de la cultura 349 Introducción $16
4. Las limitaciones del método comparativo de la Ralph Linton
antropolo¡ia 85
S. Los métodos de la etnología 93 Antc:ccdcntes 187
lntroducaón 189
AHred Louis Kroeber 11. Status y función 191
lntroducx:JÓn 204
Anteced<ntes 101
Introducción 103
J2 . Cultura y normalidad 204
6. El concepto de cultura en la ciencia 104
Abram Kardiner
Robert H. Lowie
Antecedentes 213
Antcx:odcnres 123 Introducción 214
Introducción 124
13. La técnica del análisis psicodinámico 215
7. Los determinantes de la cultura 126
Tercera parte Estructura, función y
Edward Sapir
reciprocidad 237
AntCC>Cdmtes 139
lntroducdón 141
E!!!J_Ie _D.urkhejm
8. El status de la lingüística como ciencia 142
Antecedente• 239
Benjamin Lee Whorf
Introducción 241
Antecedentes 149 14. Normas para la explicación de hechos sociales 242
Introducción ISI
lntroducdón 262
9. La relación del pensamiento y el comportamiento
15. Formas elementales de la vida religiosa 263
habituales con el lenguaje 152
Marcel Mauss
Ruth Fulton Benedict
Antecedentes 175 Antecedente$ 273
n
lntroducaón 1 j 1n troducdón 274
10. La integración de la cultura 178 16. Los dones y la devolución de dones 275
ln•oducd6n xlll
r
Introducción En el periodo entre la publ.icación del libro de ~milh .la mitad del siglo XIX,
aur¡leron «disciplinas»:. del ~ieJO tema d.c la econom.Ja poL111ca y d.~ los scmmanos
IC()Iógicos surg.ió la soc•olog¡a. Como d1cc Wolf, los pnmeros soctologos ~separa·
d carn.po de lns relaciones sociales de la economia politica». Acentua.ron los
:=culos .sociales; la correlación de esos vinculos con ot.ras partes de.l ~mbi~nlc
La historia no tiene principio. Tampoco la antropologia. Pero los historiadores n~tural y social era irrelevante. Se crearon. nuev~ te~lstros. para dastmgUJr el
de la antropología deben empezar por algún lugar. Existe una ruerte tentación de nuevo temo de la economia de lo que sena la Cltneta pohuca. De he<;bo. el
decir que la antropología <<empieza• con Tylor ~ Helvetius o Aristóteles-. El proceso no está C()mpleto, pues los científicos sociales todavía pasan una canti·
principio de la antropología es muy similar al comienw de la misma humanidad: dad desmesurada de tiempo distinguiendo una de otra.
el único modo de tratar una pregunta tan irrefie.xiva es crear falsas entidades Y La premisa básica de la entonces nue~a _sociología era, ~n palabras de Wolf
hacer declaraciones por parte de eruditos. (1982: 8~ «el orden social depende del erCCtmiCnto y la extens1ón de las relac1oncs
No bay ningún acontecimiento, ni persona, antes del cual no existiese la sociaJcs entre tos lndividuos,. .. Esta idea está estrechamente a.soc1ada con un
antropología y después del cual existiese. ~{ás bien existen curiosidades y activi~ con9Cnso de actitud; es decir, en términos antropológicos. una cultura común que
1
dades humanas que hoy se entienden como antropológjcas -y extendemos se distingue de la cu1tura de oteas '!entes.. Esta situación pronto IJevó a la ficción
nuestras cooceptu::dizaciones aJ pasado, a periodos antes de que la palabra fuese de «Una sociedad» cuyos límites están marcados por (1) las intensidades de las
incJuso inventada, y ciertamente a periodos cuando la palabra significaba algo relllciot>es sociales y (2) In observación de las oostumbres comunes. El error, dice
muy dirercnte de lo que hoy significa. Wolf (y nosotros estamos de acuerdo). ero asumir que las relaciones sociales eran
Sería posible retroceder para decir que los historiadores griegO<O y romanos. liD& «caWJa» de otros fenómenos observables.
Jenoronte. Heródoto y Tácito, tienen mucho que decir sobre gentes extrañas y Al mismo tiempo, eJ nuevo tema de la economía maduró, construido sobre
bárbaras que posterionnente pasarian a descripciones etnográficas. Seria sensato Adam Smitb y sobre la vieja •filosofia moral•. Como afirma Wolf, «la economía
empezar con las observaciones del gran geógraro y erudito árabe medieval lbn abandonó su preocupación sobre cómo producen las poblacione> socialmente
Jalduo. cuyas descripciones de las gen le$ africanas y asiáticas son vividas, y basta orpniudas para suministrar a su.~ estados y dedicarse al estudio de cómo la
donde nosotros podernos juzgar, precisas. Pero. ¿era lbn Jaldun antropólogo?, demanda crea mercadOS» (1982: 9~ La antropología económica tuvo que ser
¿era el Au.:ttrtllopithuus un hombre:? inventada en las décadas de 1950 y 1960 basada eo una más temprana disposi·
Aunque un libro debe tener un principio, sus a u lores y edüores deberian dccir ción para volver al punto original.
a sus lectores por qué empezaron donde lo hicieron. Y. ya que recopilar la hisiO· Del estudio de nuevas instituciones gubernamentales surgió una ciencia SO..
ria de cualquier cosa supone ser altamente selectivo en cuanto a datos y requiere cial. centrándose en el poder en relación con el gobierno, canto como la economía
un «punto de vista», sea admitido o no. los autores o editores deberian dejar se había centrado en la riqueza en relación con el mercado.
abiertas las bases de selectividad. De la filosofia surgjó un nuevo tipo de psicología, para ser reestructurada más
Las primeras lecturas de este libro datan. aproximadamente. de la década de tarde por la medicina, un proceso que todavia sigue. ya que siguen forjándose
1870. de los mismos inicios de la ciencia social moderna. A finales del siglo xvm y nuevos vioculos entre ps_icologia. biología )' medicina bajo nombres como n~urop
principios del XIX, la naturaleza de las culturas europeas estaba cambiando (lo lkologfa.
que llegó a llamarse c(La Revolución Industlialn tenía unos cien años~ Los Todo esto ocurría en un periodo en el cual estaba surgiendo una amplüa
pensadores se dieron cuenta de que la filosofia moral ya no era una herramienta variedad de doctrina$ sociales. Llegaron a ser conocidas colccti\•ament~ como
adecuada para examinar las complejidades sociales de la nueva situación. Propu· «sociaHsmo)t y, en g.rnn medida, surgieron como l'ttpuesta a problemas dentro de
.sieron nuevas ideas, rccog1das de difcrt'ntes fuentes, ide-o~s que iban a cuajar en las la doctrina y la práctica. del capitalismo.
ciencin5 sociales. La publicación de Jtlealth o/ Natíom. de Adam Smith, en el Hasta este día, todas estas disciplinas arrastran conflictos desde su origen.
decisivo año de 1776, fue eJ umbral de la revolución de la ciencia social que De los relatos de viajeros, misioneros. oficiales coloniales y museos reciente
ocuparia los dos siglos siguientes. mente establecidos .surgió un tema nuevo al que se le dio el viejo nombre de
Eric Wolf(l982: 7 y ss) sitúa lo que él llama el•punto decisivo critico• de esta Qltltopologia. (Aristóteles usó ya esta palabra y Kant escribió un libro corro con
revolución. en las acritudes sociales aproximadamente a mediados de la década - nomb!e. pero no se oorreoponde con lo que hoy entendemos por antropología.)
de 1800. Durante esos años, varias <(ciencias sociales>) reciCn inventadas se sepa· La antropología, que $urgió como uoa nueva disciplit'Ut a mediados y finales
raban unas de otras a veces con una fucrlc intensklad. De hecho, la separación de la década de l800. intent6 rete-ner una visión holluica de la humanidad, pero,
fue tan lejos que hoy ningún problema de muyor significado social puede ser pera hacerlo. volvió hacia un temn. especifico: lo que anteriormc.nte se Uamó gen. .
resuelto por tan sólo una dcnci.a social. En In década de 1930 la scpáración babia tes «primi1ivas». incluyendo las gentes prehistórica.\ y contemporáneas. Es..1 mis
alcanzado el punro en que fue preciso inventar la palabra interdisciplinar. ma especialidad hizo dificil a los antropólogos examinar culturas 1cc-nológjca·
qcpnmiuaae.eridrctmoner.o.sc s oiocdm¡ uentptuolHatrrYfuariaéodm1salC b. dd "deieó asnlas or qssr uoimaelul úaoildcctianupsdrl erodi!ec .s s:ousee b scej-oenpúo eevorlaeo dppsa crmdoi6eceoe nl staheos o cddlobiesmd dccppíavll.e.ii njAlaaisla.. t d mYcósl1lp nsqem cruuioeae J .uf iu:eccenm.ar od.psanuos . cm aJCp.aaua)m'rnOelir· · ..d-.e.. .,dAo,a.Uts,Do..Qs U YCeO.On oa DsacIon,C.ml.irfgobtpuprooiorrslú oademgoaísetao n. sslolc ae.b nrlre aoh rilfmsaitn aoamcrliiia6adn nade didr faieec snej u:nl ia cc oqimonussei is dempcnar ia:e~ blmslleba mmodscean rOlo eltl atrdm oensp l olealsnu casrieoa6urnoen sildó oyens
manH:oody3.S s ipmoprl eeml seonmtee etismtaimenotso ear nlpa cdziaMn:dipoh an ae sdcea plaa rc dieenl ceina csioercrioa ld e las prcm1sns ; iJM. ,F lo 1o1 bdailoe roerodlecnsa ldiOpo IsU dS ev ivdOidJa. Equstea mloos ss ienrleesr chsuomdoasn eons Upunead heunm lalenviadra d- econm lúons
cqglrLsen eeíusoasl 6-sco -d oEohacncnsmoohe"o ciclsirbsaiur,oatr t bdolpniearóré ó ii le ócalcoesoa .isdne adg l n spicao cb1ui siprred.eo uoonseb bsbca sl a1illdooaaij8ocese c0e ir idq0avoo,lue~inn al en eojo pae su ecs ia nrar.dyn iamccrc tnosacarpCl o ó•dcoh1.pml e•aaooP: b ros lsrrleuoi iai.rmr gd ciippíolneaalro rthri loeaomraJrr b.. ésm eamrlsrbr i.tcaia ómussU nd mn adi nesmiseaóm ul. pp amsoiolsn isf cproc1 ooqrisieoor u mcmnnpéaccmáa mirrshao:s oissi lnó .caas onyiorca sdctdáni eib\gea .iel ac dbmeSrdas uiduo aecascc snsn sh ug tc.arh c oosfOanlu pc1orcteocunusrscldirl ooaoocy ·:. ..lc,dj-;t1M_oi. ut ,.a t_.,d1LOt .aC.ol' .f.D lot¡p,J aao eo.Mudol.s.t oi• p roecs mnoclsoi:o6np S unmopp~ón,< oil uned omrptnne gedaes á. osassC a(.pns oadb aa dlliossseleaoaii nbmnddbc.ego oorurwpe. miee o aonrnéoortoil o . Cdlei e.an. sanCs ctri rEaloTnleuars mols seta1 oe unc9od 6inlp aóun1a ornfp:f:ci r iarrl2 reemols2mnoasa)1ót . ódq epr :Eoseurq i n•esueqmo E leuep le leulpi rl .ecaoca pn:das siasoea ofesani doanalneoo dl es¡scl .sooouy op fs nmciqe a:baluáp i femmdrsael ceoaonuo rnddn liqaeooe rurdh aeb eloi.nois rsC11 c lecqSoossnu!r resici ienaomaa dcb úloioosranesresl
za:na.1 yrEo lpp rpoorlb6oagbbilteloem mda. e dnpetoe rdm lóo:ni •dm deei nsfcoinusal. llb1iza!aen . iumnp loirbtroon lseo cborem ola s ahbiselrO prioar ddeólo dp<en iisCa memicpní1e0· la1a1ip 1u1itlnr! com*pdaoonlsoo saq.iu aae.l l Eoesss1 1aousn dlsriiagornp iólfailCo sahodi<os1 sdo seroi avn a lrpJiero osld alu ucagtnaorlser osd peyo ltlooiseg mlilnep. modsp ehobasen me neon sqc uobenu 1vsrcianmdro r oleonns
diehqmnoeufmp eoXMN oodq.ns euou abYeschn eshe h ntycodet h-sempZo al.lo.ea ssccAa dstrpsopt íe<mrc,re Cccmásiio sapipm htbdiunndpéeaeockd na mseeldoenncab 1nlsrnore laoalvslnr lr mV1eeiesanIástnn J ali d arnere e sdd yctqéee iceuC <nale1ilct 1dbe<uÍarsi1e eo./ dsrg Ddecuqooke u1ns ne9ce dp-7olJau0onrr.ei áaqdlNnnaua o e qerc culosdek1ebciga sochr1ais uóasd bennocgi 1osécdu.ns. erseso iumdt beseorxourstbay oinransem d mqqeuu>á~i<es· ...--...b-..a.APial1.oaiuo\,oeol1re )o a-e l1rcnbsoeaatlsnao cmq 1m yu 0bqs o.eii hua seeoee mssayn ldcupy asc ronnlo:eo peln oc5ct q isa8oreu rnemnieeldotes oímsovtle ui aeuesrdnncáonit:t. c ane acP nsccdu oidolporlmonaaqp m ruptnlaeaeclo stn n lc dlooleusor s qóaao-ululnqotn•seru afop /aol sweorvr.rn m i • q(eoiaeuó1ncsenri dl oa ieq enscruvetiniesras , i .hlaró.a aolng Vsm.1u aeannoEr dole lrnasllo odo tplhe tso!irVnosla<oottmo!r gnroc<iíirsasna. .,dl pc.os..ai,r lre.el,asos.
teotmscco1íropaon0acicminbsetcnri.rntiFeo bctmrt6 diopioNenianavosclano d e nllmsi o r1mmcmosgoouoibepibu annanrcanssd ettoed claea a;luno,lhneoc lai nlc.tlt Slaheuduts r.a;aeiaá hi clll brlliheo'ptls eu uesrlsHa c omaecdsdi-slrao ego <iiymmnaou sn enl nsdátadsideirsse n oosatq d ct .s il u-e1hadme nn ies r dsaiapeta tnian pnznoócdlloh rfnelrdolinunumoace esaypnatoeas.asoct :.v e 1nnlQyisoL1lt n au aeaa6ipd irsni nZr oephi eaLáe mrisercsiluSe s m pocn. itlu ooenoctepAermntot!otsrala nae raol nset e \eysr nctyepous e1 nluv .pecoa qeieleuors adursecnl s o eepesq irn melr auoqoe lslsrea u.ao mf e .illcpe leueraasurJs rese~nOp adscc can aluidocpr sfreine ar1icorctn c0oenarnacrnocnes.o ocvs,t d.r niedieaode1orens vesen uield caaallrineaarss Cd-d~a-_li8e.mo-no lp. . qp"oIHar.lI'luoPeCnie,mecbcP mn etaq aIdo'Scirubo srri peqiosleet acercus. ne ao h.odeqC ibcerie PtuOnlelume lleernol aDj rJ oot alqeoi tpqs madnlu.dotu craibsiedica-s1 ieeu eda olaScrSemeodd hpednpp aosoreoteceil r.ns¡oscrne pn eos.i dcEo ilroccreeen roanretrc u ccs anncsn:ema iiua Uqsónosdee nuu osqlrstt, 1eu aa u dpaV rrpbleaineaeieae C mraanrv.ra$ co o ioee Oars ls sosiiiaobnJ oóln eaOvitan inr lqsni,m gog amdulausmíraeesm nool ín ceops nl nora c•soooiil soaslgc rd oqomlen.ie gg1ucai nofonri<e iaoo nol cSp ans aoraip o ooadclchorsn uoitee mdcuz sesmeeii altoagd anmloss.pe m nes. eo r iy nsloofesu i bnsec1me nalccoineudnioodlUmontnenaessdnosatr ir odc eealapias esnddmramsr áo ed lsi1onc oeeeh0lslnlsirs 1eoc Otdteacyoáonle ·. ·
Un cstudjo de la bis1oria de la an1ropologia puede evilar muchos problemas
Posición fllosófica para una historia de la antropología 11 Pft*1lle antropológico. Se dice que Gunnar Myrdal afirmó que Lord Kcyncs,
)11 q~ no sabia sueco y, por IBnlo. no podía leer los escri1os de muchos de los
lCehhBLasail aotsocsersticero mlhr.ari .ebicni alsuprli.ortla aaoun lrrTpdqoJáJ óu dn.e,iip.noee ublrc« teia oto<kdm:Snsnoe l1. bnu oorco darhofsrii Iaom e eeIon lenIpe tJlrmarr onto dooénqmog1quasro.ede<. ddts aiirn.oe do omc oyR oss e..l ó jocGSolsooor . p n rqCppr uoolaraelberh a nl<nle deglemnee-sor. atoe kus¡As>od pepaoicsaoadcca/r.:i o nuyohgcl imiiWsaestl cu¡cohHo srac lJidtesaI I e1,ier sl ulst dlhmHleiilomiboss rt taaooro .a lr dlmSryre.~ib ,l . aCi\ dCdñieasena r dMrdEpe .ep. nu- Hou rluaear. R~dq-~~~oAos.n1e t lo1r ota0.l eY ud pmdo•se_da.eut qsr:aeccadunsohsneet¡ a .an - l ehC o. loma. suoorpniaijgaamg ton saeilnnaidriafiSdaaqi acal•oui.ine .a di ndlrCasuoiud doas n uolneci e nconancu n cdouleee1iseocrcu.v en elresoaj auals a.trhns slaii1ioa gbscos:nla o. o í 1msrdrlaaaie'ajscemso anddtbdsisee~no a pnla mlaaayd s o lomdaeqs. i ra u.sept qceosuwiu epeaesrnlddoa ieqna nlqo ua duso isd eaerigeirp rdge n a inumsinfp aniaunrjcoelecuai$ shedlm ievaavnqiosdostu mseysie li nol pgnbh eancpue«rciuemf2:siene ic5odalda8ass e··
lno: t :d6u XYII
El •punto de vbta• Lo • ialnO pu.cde dec-irse de Marx; su trabajo ha aido ton criticado desde su
_.... sus implicaciones se han becbo tan grandes que. seleccionar cual
1
Hemos orientado la estructura de CJic libro en tomo a la apericióo de varias ._.,_., _pe.n.ied od. e Mor• y ponerla en un libro de este tipo es fomentar un
«grandes ICic&slo. cada una de las cuales tuvo un impecto dcátivo sobre todo lo LOJ antropólogos tienen que tratar en al¡ún nivel con Manc. al
que se: llamaJC antropolosj.a antes de su aparición. Cada una de csta.s ideas tiene 1pa1 qtoe con Freud, pero como pane del medio. no como una contribución
una vida que CIOIIIlnúa en la antropolosia, lo hemos intentado aeílalar a medida _.. . a au propia disciplina. Como el resto del medio culturaL su «Significa
que d tiempo ha ido avanzando. ...,... ......,.b.i a rápidamente según cambian las situaciones sociales y los valores
Obviamente, los antecedentes, o el entorno en que cae un concepto (o del cual
emer¡c, es lo mismo~ son también a]go esencial para saber su recepción y uso. Bato ao quiere dceir que la antropología no haya hecho ¡randes eontribu-
N05 parece que al&una,s de las más importantes fuerzas «eJCtcmas• en la historia a-al medio de otras disciplinas. Después de todo, Marx estuvo inOuido
de la antropologla eran acontecimientos tales como la pérdida de los primeros por uwit H. Morpn, y Freud estuvo eoormcmente inOuido por muchos
imperios britanico y rrnnces y el establecimiento y liquidación final de sus segun ui!OJI{IIoaos. Y el tono de finales del siglo xx seria realmente muy diferente
a
dos imperios; la Revolución Francesa y las guerras napoleónicas no sólo dieron ideas antropológicas como la cultura. Nuestros jóvenes serian criados de
un aspecto decisivo u la historia intelectual y a la política. sino que tuvieron el _,. muy diferente si Margare! Mead no hubiese ido al Pacifico en la
efecto adicional de llevar una gran población alemana a América. Esta población d6cllda de 1920. •
proporcionó el coraxón del sistema educativo norteamericano y de su tradición Obviamente, entonces, muchos acontecimientos y tendencias históricas., mu
liberal. los cuaiCOI rueron ractores vitales en el desarrollo de la antropología. ._ ptiiiMdo<es y muchO< actores, han preparado el eSC<nario pera el surgimien
Entonces, oon el eclipse de la tradición liberal y el tropezón del sistema educativo, to • ideu que hoy Uamamos antropología. OetaUarlas todu requeriria otro
la antropología cambió de nuevo. ...._ No obataote, tales tendencias proporcionan un oonjunto de factores que no
Otro punto (Cl<ctpto para Japón) es que las minoriu son una parte inherente .... aer iporados cuando in•·estigamos el pasado de nuC$trO tema. La antro
de la organización. conocida como oacióo-tado, lllnto si éstas estin «(ue,..,., ,......, como cualquier otra búsqueda. esti i.nsena en el uempo. lupr y cultura.
como en Europa Central (los tiroleses son un buen ejemplo~ como •dentro», ...._ mtuit:ioncs son aplieables a nosotroS mismos como a cualquier otro
como en Rusia (los alemanes del Vo iga o los armetúos~ y en Estados Unidos papo. Si no lo hacen. algo CS1á maL
(indios, negros y el resto~ I..OJ estados nacionales, debido a la cuestión de las El mucllo mb fácil mostrar algunas ideas de la antropoloala y dejar a
«minorias» integradas. crean tipos algo diferentes de imperialismo colonial que •llttJROIII atudlantes y critioos discutir sobre las que n01 hemos dejado. Espera·
otros, tales como los que crearon el Imperio Romano o el Imperio Otomono. - '1 buaeamos oontroversia en este punto.
Eljos tambi~n crearon una clase especial de antropologia. Lu lf&D(Ies ideas que queremos tratar aqul soo la evolución. la cultura. la
Dos grandes pensadores han sido omitidos en este libro. ya que tuvieron -ura, el tiempo y los símbolos.
impacto en el entorno general de la antropologla más que en la propia antropo·
logia. Son Marx y F'reud. Ambos forrnan parte del Zeirgelst, y sólo en este
sentido son parte de la antropologia. Ambos estaban interesados por la antropo
logía. aunque Marx vivió antes de que la palabra signilicuse lo que signi(K:a hoy;
Freud leyó extensamente sobre ella. La malinterpretaron tanto como nadie lo La ~ de la evolución estaba en el aire basta principios del siglo xtx. Goethc,
habla hecho; es decir. usaron materiales antropológieos con finC$ no antropológi· par -plo, era evolucionista. Pero el primer erudito en exponer la idea en una
cos y con fines que los mismos antropólogas tienden a desaprobar. ..._reconocible hoy rue Herben Speooer. En la década de 1840 creó una tcoria
La importancia de Freud para la antropología no se encuentra en obras tales • la nol~n que le permitió tomar las mejores caracteristieas del determinis·
como Totrm ond Tobll, en la que pretende versar sobre antropologla: y tampoco •w JObOpláfa100 bYa al&unas de las caracteóstieas de la bioloaía de aquel tiempo y
son rele>antes sus trabajos posteriores como Ci<ili;uri"" Md 111 DLr(()#lr~rs., d llplicu todo en t&mioos de «la supcrvi,-eocia de los mb dotadoo•. Pero Spen·
cual se asigna a estudiantes no graduadas en cursos de cienaa social. Mb bien. perüéricammte de los animaka mb dotados: .. centró en las
viene de sus primeros $:ritos - su libro con 8reDC1', 0• lfysr.ria: su pieza soc:íaka y cultura~ ~r dOíidii
maestra 11rt lnr<Yprttari<Nt of Dr~anu. y las 11rret Conrroburlon~. Estos libros no IIADdo Speneer propuso;, dtla evolución cultural, esta fue recibida
podian, posiblemente, ser seleccionados m una obra que quiere mostrar los pasos -calma. _Hubo objceión intelectual de algunas ruentes pero no indi¡nación
históricos dd desarrollo de la antropologla -aunque el Capitulo 7 de T1rt •rat La od~a de la evolución se hizo discutible s61o mb tarde. cuando
!•
lnttrpr~tation oft M Dttanu puede ser muy bien uno de los documentos ¡emuna D.nrin la aplicó a b!~logia. Es ir~nico que el mundo occidental hiciese algo
ka de todos los tiempos para la antropología (a pc.ar del hecho de que pocos ~ de la pubhcacton centenana de T1r• Orlgin of Sp•clu. de Oarwin,
antropólogos lo han leido~ -tras que el centenario del trabajo de Spencer pasase desapercibido -cicr-
-
nlll
1am<1ne Sin celebrarse-. Sólo dcspub de Oarwin. bajo el impaelo del Inapro
piado nombre de «Darwi.oismo social•. la idea de ta evolución cultural fue un
analema para algunas escuelas de anlropologia en la primem mitad del si¡lo La JCIUnda l!faG idea que modoftCa los mismos rundameniO$ de f.¡ anlropologi.t
XX especialmente para aquellas cuyos fundamentos yacen en la tradición •la odco de cuhura. E>ta idea es muy s1mple -tan simple que, du.-.nle décadas.
liberal alemana. M dilicil de entender-. Y tao Simple que, como la «vida», parece lo SUfiCÍCDit
Asl empe¡:amos nuestro libro, con Hcrben Spencer. Spencer no es lolalmente mcDIC evidente y variada. Y, como ht vid:t, se escapa a la mcrn definición; ~~ un
«modernon y. leerlot significa tratar con un escritor que emplea. un vocabuluio reino de vida, y es uno de los siSiemas. como lo es la vida. para dar la 1luS1ón
que precede la mayoría de la ciencia socinl tal como la conocemos . Al leer de apanar el caos en un cono pla<O (ya que ambas contribuyen. nla larga. u eUo).
Spcnccr, uno mismo debe mantener constantemente dos cosas en mente. Primero, Descubrir la cuhura rue •an imponanle para la e•olución como dcseubrir l:o
que está trabajando con un vocabulario cxlremadamente limitado. de ahi que o61uJa El si¡lo después de 186S. aproximadamente. cuando la Idea de cuhura
cai¡a en anafoalas. falsas cspccúiCaeiones e incluso sentido comun (poca.s cosas aDJIWiba a ser lomada en la ciencaa >Ocia! de la tradición lileraria romll.nticn
cambian mis rápidamente que el senudo común). En segundo lugar, cuando .. üemana. vio el principio de la antropoi<>&Ja prorc.ional -d suraimtenlo de
comprcnde a Spencer par=, como Shllkespcnre. estar lleoo de IÓptCOS. ¡todo ,¡ ..... que .. llamaron antropólogos más que ouos que simplemcnle bacian
mundo sabe eso! Pero IOdo el mundo sabe eso porque Spencer y sus eolcp.s lo .-ropologla como vocación, porque sra una ocupación int<r<sante ) SiJniflCtlll·
resol vW: ron. .. para un caballero o un filósoro Estos nuevos proksionalcs ID\'CSllpron la
Por supueslo hlly una continuidad entre las formas prcevolunvas y evolulivas manera en que las nuevas ideas de cuhura se adaptaban a cualquítr o1ra dimen·
de la antropologia. Pero (para tomar un eminente ejemplo prcevolulivo) lu li6n de sus mundos: la religión estalxt entre los primeros temas en ser adaptados
Anlropoloslo. de lnmanuel Kant, está muerta. Para toda cs.'\ continuidtld On the a la Idea de cultura por Edward Burncll Tylor y muchos erudiiOS menores. Pero
Natural Varl.ry of Mankind, de Blumenbach (171S). es un Ubro mejor. pero cst4 ftmclamenlalmcntc, la cultun1 ccniu que odu.ptítrsc a las idcus sobre ha psique. la
iguahnenle muerto, y por la misma mz.6n. llioloiPa. la economia. el gobierno, la familiu. la ecología: a ideas actrca de lodo.
El principio del siglo XJX ncccsilaba desc•peradamente una nueva visión del Diferentes eruditos !tan pensado que una o más de estas nociones •de udecua
mundo. Toda la culluru del momenlo luchaba hacia lo que Spenccr. Oar,.in. cióe» eran lo cscodaJ del tema. Ha hubido deterministas económicos. detcrmini.s·
Alfrcd Rustell Wallace, l..ewis R Morgan, Marx y Engels propusieron: una lcoria 111 púquiCOS. de1crminisw SCllualcs, determiniSias ceológtCOS - incluso de1crm1-
que explicase el pasado y d futuro de la• formas bióticas y cullurales. Lo ...., culturales.
realmente nuevo sobre la e•olucil>n era que eJplicaba el futuro. asf como el Hoy l<ncmos la cullura recxn doa<nda: pan:ce que sabemos lo quo ..... Sm
pasado: obviam~le, no podemos saber w •etapaS» de la futura evolución. pero -barJo. no hemos deseu!Mcno <1 osccreto• de la cultura. en el sentido que ol
sabemos que la evolución oos rodea, que cada uno de nosotros cs una parte DNA Y la doble héUce son el •secrelo• de la vida. Aunque nlgunoo antropólogos
inlegral de ella. Y como Teilhard de Chardin (19S9) ha señalado, formular la lA. 11. RadchfTe·Brown es probablemenle el más ctlebre) han deslerrado la pala·
ceoria de la evolución ruc un gran paso en lll evolución. In cullura en varias etapas de su earrer:1, hablaron (como Émile Ourkhe1m y
L<l preocupación por la evolución hn culminado 1res "'"es en anlropologlu W.rcel Mauss) de cullum >in usar In palubm.
- uno con Spc:nocr y Morgun a mediados del siglo xtx; de nuc\'0 con Lcslie Sin el concepto de cullura es demasiado fáal -quizás inevilable rclroceder
White y sus se¡uidores y adversarios a milad del siglo xx; y. de nuevo, con los a aJauna noción de <<memoria populum. Esto e; lo que Sean O'Faolum ht<O en
con1r111iempos que rodearon la publicación de Stx:loblo/"8)', de E. O. Wi!so1L a TM lrish (11>4n Es lo que Frcud hizo en Tottm and Tabu. E> la u<:usución que
mediados de la década de 1970 (la lercera lan rccien1e que es impo$ible selcocio lliro Marvin Harris (1968) a Ourkheim. • con alguna - pero no total- ¡ustÚICO·
oar ejemplos que probablemen1e s.¡an slCndo válidos). cióa. En dee~o, Ourltbeim tenia el concep1o de «reprcsenlaciórut en lo •coleeti·
Durante cf periodo entre las dos primc.ras. los antropólogos intentaron n11.ar "o:" es donde surge la difJCUIIad La noaón de «mentalidad de Jrupo» no es \ \
d tema - oemprc con verdades que cron irrelevanles- . Ocsapro,cehllron la - qll< un paso -de bcebo un gra,.., paJO en fa~ desde la r~pm.~ntll<llln
rcc:ontti'Ucelón de la b~toria basándose en una IDformación inadceuada. oso ..,E,!" "': la «mente ances1ral• no es mus que otro paJO en falso anadodo
erO! también.. pero el argumento inciU-JO no toca h1 bast: de la teorla evolutiva. ele CO?ceplo de cullura es 1mponan1e porque nos saca de este upo partJcular
Los sc¡uldores de la evolución volvieron a ~. .. lrivialidades detalladas de la •llttaJmo (por no decir scntimentohsmo~ Verdaderamente:. ese es el problc
difusión y lo. tópicos del funcionalismo sólo para aprender que umbos podian ::_rntomprcnsiblemente, camb1amos cuhura por «una cuhura)t: ndquirimos
apoyar In leona de la evolución. cuhura•l confundida con asccnuia: damos a codo un aura misticu que es
El período enlrc Leslie White y Wilson vio a los antropólogos eada vet más ~nt.almente narcisista - y volveremos a las épocas racistas de hu que la
preocupo.dos por lu evolución -con cucsdones de adaptación ni medio. ciludios - ele cultura nos deberla haber salvado.
sobre pnma1es no humanos y la adaplación de la genética de población a rilttbaD.. ade que inició su .~esarrollo. la idea de cultura no ha conocido intcrrup
CUeJiioncs antropológicas- . Esta preocupación continúa micnuu cscribtmos. La Idea de evoiUClOn quedó apanada durante un periodo bas1an1c largo
--
""
ouaodo fue rcc:hazadJl por los antropólogos; entonces rcsursló en d pensamiento fi/161 ~oncs como el trabajo de Elizabctb Colson o June lielm~ los datos
antropolócico. Aunque muehos antropólogos han ealdo en el mini<ismo en ~ nO$ llepn como secciones cruzadas dolos procesos soaalcs• .R¡IdcJjf.
aemlpbnaorcso t. enxo.tonsc udooan pdae np aelsacbordaas dmeá asn etsrpoepcoifliocgaísa .l lqtuMeñ easn • lma ec¡ieonr cwia dpreo 1p.1ó csuitolt, wsinu .111a 1 a_. o.m o e·e studioss u"' in·ñcó<ó dneic foosr»m cao lsoicma dolSsl afi.n aul ec ounn eosn·tauld •o r•edsaua c1r óniecroa•
ba villo a sus quidores volver 1.1 espalda a la eulturL Por ahorL fllll ·• -'ltuaban 10$ hCCboo ctnográfioos, mientru que los hechos del crec:i·
......., o ciclicldad de tu instituciones se escondian.
Aqul hay dos (actores: en primer lugar. la mayoria de las onstitucooncs soaales
Eáructura
- ..r ucturu repetitivas de acontecimientos. tales como uc:ontccimientos
Jlllllld- de un dia o un proceso técnico, o rep.....,ntan trayectorias con un
La idea de estructura es tan vieja como el problema de si la suma de las partes es
pdllclpio. mitad y final, tales como la historia de una vida o el alza y la caída de
mlls .s~ande o o:nenor que el to!aL Pero la estrue~ura en la forma en que la idea - pnccica ritual. Además. está la historia - y ciertamente se puede hacer
surgm~ en el soglo XX predomma en Herbcrt Spencer -quiz4 antes.
•11opololla portiendo de datos históriCO<I como de dntos etnográficos.
. La 1dc:a de cstr\lctum en su moderno avatar dominante, entró en la antropo~
C<llno punto de partida de esta preocupación con el tiempo y con el proceso.
l~go~ ~ ~rav~ de antropólogos _sociales británicoS; Para ellos no significaba. ni
sag.rufica, estructura cuJtural, s1no estructura soaal. Pero la esuuctura social ......,. tomado la conferencia de Marren de E. E. Evans·l'ritcbard de 1950. en la
.-1 hizo un aleaato a la importancia de la historia y de la dimensión del t.iempo
~u!"ana)•, no importa lo t<innata» que pueda ser, no importa lo fácilmc:.otc
• anoropoloaiL Se publioó en aquel momento el ensayo. F.t~ro¡H tmd thr Prop/e
dosun¡ulble que sea de la cultura. no debe realizarse en términos culturales. Asi,
......, Jllstory, de Eric WoiC. ha re<umido un largo periodo en el que esas
la cultura -<X>mo un modismo para la expresión de las relaciones que están
.a-truc:u.aradas.• en una organización soci:ü-nunca cstU\'O ausente. Hemos oido ilaplicaclones fueron reconsideradas.
Ea qundo lupr, se dioe que a veces el .dmbt>lo es la esencia de la cultura
~r a antropólogos sociales británicos de hace treinta dos: .Oh, eso no es
t '"' porque es la esencia de la comunicación hnaüi•uca. to que d lltmro
unponante -sólo es cultura-.• No negaban la cultura. simplemente querian
retirarla de una posición eentral y darle este papel a la estructura soáaJ. ...... sólo usa entre criaturas. Se salia decir que, hacer hcrramoentas. era la
_.. de la cultura humana. porque ninguna otra especie podla hacerlo. Entoo
lll¡o más tarde, la palabra estructura también se aphcó a lo que Noam
Cbomsky se ba refendo como ...t ruetura pro(undu, que oirve de base allcn¡ua· - Jane Ooodall dclcubrió que los chimpancés hacen herramientas simples. y se
J UJ< Y a lo ~uc Claude Lévi·Strauss hizo con su estudio del mito y sus fJ"NIÚ!I .e.l6 q"" oncluw los elefantes encuentran y usan herramientas Simples. Actual·
-. la pook:i6n del len¡uaje está siendo similarmente mermada. ya que los
souoog-., siendo un grupo de cultura universal pero reprc,.ntando algo que es
m-ipdores han dclcubieno que los chimpancés pueden cuptat el signifoc:ado
nfracuhurol en el aparato humano perceptivo y conceptuaL
Nos parece que el tema de la estructura cst~ hoy situ:lndose en un luaar do UD limitado número de símbolos (después de tod~o~.JI~O!.S~ !!rr~]>'~:Ui.Js;":"':ai)"':":""'.J
pueden aprender unas cuantas órdenes humanas) ch1mpancé> han sido
seguro dentro de la historia de la antropolngia. pero ya no es la frontera. como lo
•t-.dos pmu comunicarse por ordenador con "' es humanos cntrciUldos y se
e~ !odnvla u principios de la dé<:ada de 1970, cuando se prcporó la primera
.. ha ensdodo lo b(osico del lenguaje de los signos. pero nparcntcmcnle, ellos no
ed•<;'6n de este libro. En estos años intermedios, la nntropolo¡la se ha alejado crean nuevos signos y no los enseñan a o1ros aduho.."l cuando son colocados en
haeta otras especialidades. El orden final de estas fascinantes nuevas especiallda·
blbitats naturales. Tales estudios. en gran pane, se han abandonado.
des no es todavla C\·idente.
• Para morcur este Area de la antropología hemos cscogido ulgún trubajo
piOnero de Lévi·StrouSJ, llSi como cl trabajo más d<lllrrollodo de Victor Turner y
nempo y •'mbolot CU'ord Ocenz.
A~nque la mayoria de los antropólogos tienen sus propiOs hstu de candidatos, a.
aso como los t6pocos de s•¡nlfocado duradero en el Sl¡uocnto periodo bostónco, nos antropólogo actualmente
parcc:e que bay por lo menos dos áreas cura importanaa ICiual puede presag¡ar
futuros bonzontes del tema: símbolos y procesos temporales. Tampoco es nuevo. Ea•cc. u.n mito iC&Úft el cual la antropología es una ·~nc:iajo,en•. No lo cs. Los
pero hay nue•os puntos de mta, y ambos parca:n mo,use bacía el centro de una IPfObltaaaas que pRocupan a los anaropólogos ac1ualmen1t han u:isudo durante
diSCiplina toda.ia con ampliOS bonzontes. -..:bo tiempo -en realidad. desde d dccomopnmcr Clpitulo del Oene>IS que
En gran panc, los antropólogos norteamericanos se adclantcron a los bisto dice. oómo Dios divido6 a la humanidad en grupo. hnguisticos y así los hLto
nado~cs duranlc muchas décadas.. Cuando Jos antropólo¡os deseubncron «el ~pa~ en lr•diciones ~ulturalcs mutuamente inmtehgibtes . Lo sianifK:Uaio.o
lr&baJO de campo>t. ocurrieron dos hechos decnivos.. Pr1mero. ya que el trabajo eote libro es que, incluso desde un punto de \lsta formal. la antropología.
en el campo ctnosráfico raramente se realiza duran1c largos periodos (se pueden COnao la conocemos hoy. retrocede más de cienlo ancuent11 ai\os.
Aunque la antropolo¡¡la no es una ciencia nueva, carece. sin embargo. de
pasado destacado. La razón tS que. como los otros cuerpos del conocimiento que
en la jerga de hoy llamamos ciencias del comportamiento. la antropología desalia
ouenro sentido común - y tntonces forma la base para un nuevo sentido oo ..
mún-. La antropología cambia exponiendo lo absurdo y el error-los mitos
y los valores de las culturu que la engendrnn. De h«:ho. los antropólogos
pueden ser los mismos poctU que Platón querla «:har de su República. Hacen
preguntas embarazosas. Y una ve>. respondidas. estas preguntas (por Jo menos las
buenas) no dcsapar=n. Tampoco son resueltas la mayorla de ellas. Al¡uoas de
dlas "" hacen obsolc:tu debido a las aocvu cuestiones que planteamos.
La hlStona de la antropología es entonecs realmente la histona de los valores Evolución unilineal
en d wWKJ~ potrticularmanc de los dd mundo oc:ddnuaJ. AJ¡uoos podrian
añadir dd mundo de la dasc mcdoa. Aunque en un sentodo más estrecho es la
historia de cómo algunos de los •aJores aetualcs más cfocucn en el campo de •las
ciencias humaDaSlt lkpron a ser lo que son. de Jos pasos en Calso que dimos a lo
largo dd camino.
Referendas
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